Viernes 22 de Noviembre de 2024 | Aguascalientes.

¿Por qué nos damos cuenta cuando alguien nos mira fijamente?

El Imparcial | 08/10/2024 | 11:40

A todos nos ha pasado alguna vez: estamos en clase o en el transporte público y, de repente, sentimos que alguien nos mira. Nos volteamos y, para nuestra sorpresa, ¡es cierto! Este fenómeno, conocido como “escopaestesia”, ha despertado el interés de la neurociencia, aunque no existe una prueba científica concluyente que demuestre que realmente tengamos una habilidad especial para sentir miradas.
 
Si bien hay factores neurobiológicos y psicológicos que podrían explicar esta sensación, no hay evidencia sólida que confirme que podemos percibir conscientemente cuando alguien nos observa. No obstante, la capacidad humana de detectar movimientos y cambios en el entorno ha sido fundamental para la supervivencia de nuestra especie.
 
El debate científico sobre la escopaestesia
 
El investigador británico Rupert Sheldrake llevó a cabo varios experimentos para demostrar que las personas pueden sentir cuando son observadas. Según sus estudios, los participantes acertaban más de lo esperado al adivinar si alguien los miraba. Sin embargo, otros científicos, como David Marks y John Colwell, cuestionan estos resultados. Creen que los participantes podrían haber identificado patrones repetidos en los experimentos, lo que les permitió acertar más veces de lo normal.
 
Por otro lado, estudios sugieren que nuestro cerebro está en constante estado de alerta. Este sistema, conocido como atención exógena, nos permite detectar estímulos repentinos o cambios en el entorno, como una mirada fija. Así, aunque no estemos plenamente conscientes, nuestro cerebro podría estar reaccionando ante pequeñas señales que indican que alguien nos observa.
 
La visión periférica y el papel del cerebro
 
Otro factor relevante en la sensación de ser observado es la visión periférica, que permite percibir movimientos fuera del centro de nuestro campo visual. Aunque esta visión no es tan nítida como la central, es excelente para captar movimientos o cambios en el entorno. Por ejemplo, si alguien a nuestro alrededor mueve los ojos o la cabeza, nuestra visión periférica puede detectar ese pequeño movimiento sin que seamos conscientes de ello, activando la sensación de ser observados.
 
Además, el cerebro cuenta con neuronas espejo, que nos permiten interpretar las acciones de los demás. Estas neuronas podrían desempeñar un papel en la percepción de miradas, ayudándonos a entender inconscientemente cuando alguien nos está observando.
 
Factores psicológicos: el efecto “spotlight” y el sesgo de confirmación
 
A nivel psicológico, existe el fenómeno conocido como efecto “spotlight”, que nos lleva a pensar que todos están pendientes de lo que hacemos, especialmente en situaciones incómodas o nuevas. Esto puede aumentar la sensación de ser observado, aunque en realidad no sea así.
 
 
Asimismo, el sesgo de confirmación es otro factor que influye en esta percepción. Cuando creemos que alguien nos está mirando, tendemos a buscar señales que confirmen nuestra creencia, como un pequeño movimiento o gesto. Esto refuerza la sensación de que efectivamente alguien nos observa, incluso si no es cierto.
 
La paranoia y la sensación de ser vigilado
 
En algunos casos extremos, la sensación de ser observado puede estar vinculada a la paranoia, especialmente en personas que padecen ansiedad o inseguridad en situaciones sociales. Estos individuos suelen interpretar pequeños gestos o miradas como señales de juicio o vigilancia, lo que refuerza su percepción de estar bajo escrutinio constante.
 
Sin embargo, sentir que alguien nos mira no siempre es un indicio de paranoia. En la mayoría de los casos, simplemente es el resultado del cerebro haciendo su trabajo para mantenernos alertas y conscientes de nuestro entorno.