Fue un 7 de junio de 1999 cuando los noticieros dieron la noticia, Paco Stanley, que había entretenido a las familias mexicanas durante la hora de comer, había sido asesinado cuando salía de un restaurante llamado "El Charco de las ranas", al estilo de la mafia
Ahí se observó el cuerpo del conductor sentado en su camioneta, masacrado puesto que su cuerpo fue receptor de al menos 34 disparos a quemaropa.
Por meses, la noticia fue el centro de atención de casi todos espacios informativos de la televisión mexicana, los involucrados, las mujeres, los excesos todo lo relacionado a Stanley y Mario Bezares, su mancuerna en el último programa que tenía en TV Azteca "Una tras otra", quien fue acusado de ser cómplice del asesinato.
Mucho tiempo pasó y el caso se vino abajo luego de confirmar que el caso había tenido muchas irregularidades y que el fiscal encargado era acusado de corrupción, los detenidos fueron liberados, y hasta el día de hoy no se sabe quién y porqué le quitaron la vida al creador del Gallinazo.
¿Qué ha sido del Charco de las ranas?
Lo que se sigue recordando al paso de los años es el lugar donde ocurrió el homicidio, El Charco de las Ranas, era popular cuando la tragedia ocurrió, pero su fama aumentó a raíz del trágico suceso.
El lugar que fue fundado en 1996, con un ambiente familiar, tradicional y especializado en comida típica mexicana, llama la atención por dos cosas: la historia de Stanley y sus tacos.
A pesar de la negra historia, el restaurante perduró y tiene dos sucursales en Mixcoac, incluso cuenta con la misma imagen, con el toldo a franjas amarillas naranjas y cafés y mesas anaranjadas.
¿Cuál es el menú?
En el menú de El Charco de las Ranas puedes encontrar tacos de pastor, bistec, arrachera, chuleta ahumada o adobada, pescado, champiñones o nopales.
Pero también cuenta con platillos como alambres, flautas, sopa de hongos, pozoles, chilaquiles, chicharrón en salsa verde y más, los cuales puedes acompañar con aguas frescas, cervezas, café y chocolate.
Aunque según testigos la favorita de Stanley era carne en chile pasilla con frijoles y totopos y para complementar un agua de tamarindo, y que lo que no está tan bueno son los huevos estrellados con chilaquiles, ya que estos "le cayeron mal al estómago" a Mario Bezares, razón por la cual tuvo que ir al baño y logró salvarse del atentado.
No así Paco y Jorge Gil quien no falleció pero si recibió disparos.