James Clear, autor del libro Atomic Habits, explica que el Zanshin, un método japonés que fue creado por un legendario arquero samurái, puede hacer una gran diferencia en tu habilidad para concentrarte, para estar enfocado y para solucionar los problemas y superar los retos a los que te enfrentas.
Clear dice que los hábitos atómicos son esenciales para que podamos tener vidas más exitosas, para lograr los objetivos que nos proponemos e incluso para vivir mejor, y entre ellos hay reglas, tips y consejos que buscan ayudar a aumentar la productividad, a ser más organizados, a entender nuestras prioridades y a dar los pasos necesarios para lograr lo que queremos.
Pero, Clear también dice que, además de buenos hábitos, es importante tener algunas herramientas que puedan complementarlos y que nos permitan desarrollar nuestras habilidades, fortalecer la mente y responder mejor a las situaciones que la vida nos presenta.
Una de esas herramientas es el Zanshin, un método que dice que, para ser realmente exitosos en algo, primero debemos hacer lo posible por dominarlo, usando cosas como la concentración, la resiliencia y el esfuerzo, que son elementos de una mente fuerte, para llegar a la meta.
El Zanshin y los beneficios del método japonés para fortalecer tu mente
¿Qué es el Zanshin y cómo funciona?
En su blog, Clear escribe que en los años 20, el profesor alemán Eugen Herrigel viajó a Japón para trabajar en una universidad en la ciudad de Sendai. Ahí, el profesor comenzó a estudiar el arte japonés de tiro con arco, llamado Kyudo, bajo un arquero legendario llamado Awa Kenzo.
“Kenzo estaba convencido de que los principiantes debían dominar los fundamentos del tiro con arco antes de intentar disparar a un objetivo real”, dice Clear, y con esto se aseguraba de que los estudiantes pudieran trabajar en la paciencia, que pudieran practicar lo suficiente y entender qué era lo que debían hacer para mejorar. El punto es el de dominar cada elemento que se necesita para lograr un objetivo con éxito.
En el tiro con arco, Clear dice que “la posición de los pies, la forma en que se sostiene el arco, la forma en que se respira al soltar la flecha… todo ello determina el resultado final”, y esto se puede traducir a otras actividades o tareas, donde lo importante no solo es buscar un resultado, sino entender qué es lo que se debe hacer para conseguirlo.
El Zanshin consiste en poner atención en el proceso, en no saltarse pasos y en no querer acelerar las cosas, para que salgan lo mejor posible, mientras aprendes sobre resiliencia, concentración, foco y sobre ser consciente de todo lo que pasa mientras realizas una tarea.
Según explica el experto, Zanshin se refiere a “la mente completamente enfocada en la acción y fijada en la tarea en cuestión. Zanshin es estar constantemente consciente de tu cuerpo, mente y entorno sin estresarte. Es una vigilancia sin esfuerzo. Sin embargo, en la práctica, zanshin tiene un significado aún más profundo. Zanshin es elegir vivir tu vida intencionalmente y actuar con un propósito en lugar de caer sin caer en la idea de ser la víctima de lo que se te presente”.
El Zanshin también dice que perder tu sentido de propósito y de compromiso, volverte flojo y dejar de poner atención son lo que te lleva a “perder la batalla”, a dejar de crecer y mejorar, y a frenar tu éxito.
El punto, según Clear, no es el de enamorarte con dar en el blanco (cumplir el objetivo), sino enamorarte del proceso y de hacer el trabajo que necesitas, incluso si es aburrido o cansado, para seguir avanzando.
