Existen múltiples errores que pueden cometerse desde el baño, comenzando por el tiempo que pasas sentado en el inodoro, mirando tu teléfono. Sin embargo, hay una terrible falla que los expertos en enfermedad infecciosas están mencionando una y otra vez, señalando que jamás debes caer en ella: dejar la tapa del inodoro abierta antes de tirar la cadena.
La doctora Dahlia Philips, directora médica del Plan de Necesidades Especiales Partnership in Care (PIC) de MetroPlusHealth, señala que este error «puede causar varios problemas de salud e higiene, debido a la aerosolización de gérmenes y bacterias que se producen cuando se tira la cadena».
Al descargar el agua del sanitario con la tapa abierta se origina la «columna del inodoro», que ocurre cuando las gotas de agua y materia fecal se convierten en aerosol, esparciéndose por todo el baño.
«Esto puede liberar pequeñas partículas de bacterias, virus y otros patógenos en el aire, que terminan alcanzando superficies cercanas, como manijas de lavabos, toalleros, alfombrillas de baño, cepillos de dientes y encimeras», detalló la experta.
Pero el verdadero peligro está cuando esos patógenos se esparcen por todo lo que tocas y al salir del baño, sales a preparar la cena, creyendo que tienes las manos limpias.
No olvides limpiar la tapa del inodoro
Tampoco se trata de que vas a limpiar la tapa del inodoro cada vez que tiras la cadena, pero es especialmente importante que lo tomes en cuenta. Al descargar el agua, todos los patógenos peligrosos quedarán allí adheridos.
Esto implica que solo tienes que limpiar una zona específica y no todo el baño, debido a la salpicadura.
«La tapa del inodoro es una zona importante que se debe limpiar con regularidad, ya que es una superficie de mucho contacto que puede albergar gérmenes, bacterias y virus», reiteró la doctora Dahlia Philips.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), lo ideal es que lo limpies una vez por semana, como mínimo. Sin embargo, siéntete libre de hacerlo cada vez que quieras, quizás después de dos o tres descargas, dependiendo de lo sucio que esté.
La limpieza también dependerá de la persona que lo utilice, es decir, si es una persona que está enferma del estómago, lo recomendable es limpiarlo con mayor frecuencia. «La limpieza debe implicar una desinfección diaria con el uso de productos con cloro, o incluso varias veces al día», indicó.