Las papas fritas de bolsa como las Sabritas, Barcel e innumerables marcas mexicanas, no dejan de ser un alimento que puede frustrar todos tus intentos de llevar una vida saludable. Es difícil resistirse a la tentación, aunque es más probable que renuncies a ellas si conoces un poco más sobre sus efectos adversos.
El consumo frecuente de alimentos fritos, especialmente el consumo de papas fritas o los llamados fritos, está fuertemente ligado al riesgo de sufrir ansiedad y depresión.
Además, lo más lógico y obvio. Si te gusta comer papas fritas todos los días, es casi seguro que los números de la báscula comenzarán a subir disparados. Así lo concluye un estudio de la Universidad de Deaking, el cual descubrió que este efecto no solo es debido por la alta cantidad de grasas, sino también porque al tener mucha sal, esto provoca que ingieras muchos más productos y alimentos, en general.
Cuantas más comas, más querrás, y eso solo tiene una consecuencia: ganar peso. Otro estudio de Harvard halló que aquellos que incluían a las papas fritas como parte de su dieta aumentaron de peso cada año que se les fue evaluando.
El famoso lema de “¿a que no puedes comer solo una?” no es solo un slogan. Son muchas las personas que tan pronto como abren la bolsa se dan cuenta al cabo de unos minutos de que apenas quedan unas migas.
Evidentemente, la papas y fritos son un alimento que contiene glutamato de forma natural, una sustancia que estimula el apetito. Pero más allá de eso, hay algunos estudios que asocian el crujido que tienen en la boca con el hecho de que no puedas comer solo un par y acabes devorando la bolsa. Además, la mayoría de ellas contienen muchos aditivos que también consiguen que generes una compulsividad irrefrenable por llevarte el máximo número de ellas posible a la boca.
Esto también sucede con el alcohol. Cuando te fijas en el desglose de la información nutricional que viene en la etiqueta de las bolsas, apreciarás que son altas en calorías, grasas y sodio, y bajas en todo lo demás. En otras palabras, no obtienes ningún beneficio nutricional con las papas fritas, tan solo el sabor. Es posible que aquellos alimentos con bajo valor nutritivo acaben en tu estómago y tengas hambre en el menor tiempo posible. Lo mejor será optar por otros que verdaderamente te aporten algo y te hagan sentir saciado.
RAZONES POR LAS QUE DEBERÍAS DEJAR DE COMER CHEETOS TORCIDITOS
La revista el Poder del Consumidor presentó su análisis de Cheetos torciditos sabor queso y chile (bolsa de 167 gramos), mostrando el lado negativo de este producto.
Aquí algunas razones publicadas para dejar de comer este producto:
• Contiene 1,008 mg de sodio, lo que representa el 50% de la recomendación diaria para adultos y 100% para niños.
• Contiene glutamato monosódico, que induce a comer en exceso.
• 22 ingredientes en total, muchos para una botana a base de un solo ingrediente.
• Según lo publicado, el producto en su bolsa de 167 gramos contiene 180 miligramos (mg) de sodio por porción (30 gramos), lo que equivale al 9% de la máxima ingesta de sodio recomendada en adultos y el 18% en niños.
Además se advierte que la porción que se consume es bastante mayor a los 30 gramos (g) que se consideran en el etiquetado. La bolsa contiene 167 g y contiene más de mil mg de sodio. “Este producto concentra mucho sodio en poco gramaje y por ello se considera alto en sodio”, alerta la revista.
Es alarmante como en México existe un aumento en el consumo de sal (que contiene sodio), de hasta 12 g al día, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir máximo 5 g de sal al día en población adulta y la mitad en población infantil, agrega la publicación
Cada porción aporta 163 calorías. 5.6 porciones que son las que incluyen el total del empaque —y que es lo que comúnmente terminamos consumiendo, es decir, la bolsa entera—, aportan 912 calorías, lo que se concluye no es saludable para el consumidor.
De acuerdo con las recomendaciones de ingestión de nutrimentos para la población mexicana, donde el promedio de consumo al día es de 2 mil calorías en un adulto, se está consumiendo el 45% de las calorías que debería de consumir en un día, por lo tanto se debe hacer notar la alta probabilidad de que el consumo de este producto llegue a desplazar el consumo de alimentos saludables y generar una ganancia de peso corporal en el consumidor, informan.
• Según lo publicado, el producto en su bolsa de 167 gramos contiene 180 miligramos (mg) de sodio por porción (30 gramos), lo que equivale al 9% de la máxima ingesta de sodio recomendada en adultos y el 18% en niños.
Además se advierte que la porción que se consume es bastante mayor a los 30 gramos (g) que se consideran en el etiquetado. La bolsa contiene 167 g y contiene más de mil mg de sodio. “Este producto concentra mucho sodio en poco gramaje y por ello se considera alto en sodio”, alerta la revista.
Es alarmante como en México existe un aumento en el consumo de sal (que contiene sodio), de hasta 12 g al día, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir máximo 5 g de sal al día en población adulta y la mitad en población infantil, agrega la publicación
Cada porción aporta 163 calorías. 5.6 porciones que son las que incluyen el total del empaque —y que es lo que comúnmente terminamos consumiendo, es decir, la bolsa entera—, aportan 912 calorías, lo que se concluye no es saludable para el consumidor.
De acuerdo con las recomendaciones de ingestión de nutrimentos para la población mexicana, donde el promedio de consumo al día es de 2 mil calorías en un adulto, se está consumiendo el 45% de las calorías que debería de consumir en un día, por lo tanto se debe hacer notar la alta probabilidad de que el consumo de este producto llegue a desplazar el consumo de alimentos saludables y generar una ganancia de peso corporal en el consumidor, informan.
¿Qué pasa cuando una botana busca llevar este sabor al extremo y, encima, combinarlo con un color azul chillón? En efecto, estamos hablando de los Takis Blue Heat, o como ya les dicen muchos, los “Takis Azules”.
Desde su llegada a México, las frituras se han hecho de una creciente popularidad, especialmente entre los más jóvenes que le han dado dos pulgares arriba manchados de polvo celeste.
Luego de ser tendencia por toda la gente que quería probarlos, ahora los Blue Heat están en el centro de la polémica en redes sociales luego de que cada vez más usuarios reportan problemas de salud tras consumirlos; algunos aseguran haber terminado en el hospital.
Lo que sí se sabe es que las grandes cantidades de sodio que esta botana contiene pueden estar relacionadas con una mayor presión sanguínea.
Al igual que otras botanas similares, según el portal Healthline el consumo de estos Takis puede irritar el estómago y contribuir a la aparición de la gastritis, especialmente si se hace en grandes cantidades.
Algunas personas, como aquellas con síndrome de colon irritable, son especialmente susceptibles a los efectos adversos de la comida muy picante y muy procesada.
Como siempre, la recomendación de los expertos es solo consumir botanas de este tipo con moderación y esporádicamente. Monitorear el tamaño de las porciones y tratar de solo comer una a la vez es necesario para no consumir más calorías, sodio o grasas de la cuenta.
¿LOS DORITOS SON SALUDABLES?
Al hablar de botanas y comida chatarra los Doritos son de los preferidos de los mexicanos, y más si son con una buena salsa Valentina. Basta con tener una tarde de películas para comprarlos en la tiendita más cercana. Pero, ¿te has preguntado cuan saludables son? Esto dijo la Profeco.
La Procuraduría Federal del Consumidor realizó estudio para determinar cuánta cantidad de cloruro de sodio contenían algunos alimentos y, así, saber si eran buenos para el organismo. En el caso de estas papitas, una bolsa de 223 gramos, contiene 1004 miligramos (1.004 gramos) de este aditamento.
Eso significa que si ingieres todos los Doritos de ese empaque, no sería muy perjudicial para la salud, dado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió directrices de Ingesta de sodio en adultos y niños, recomendando reducir su ingesta por debajo de los 2000 mg (5g de sal). El problema radicaría en qué otros alimentos salados se consumen en el día.
¿POR QUÉ ES MALO EL CLORURO DE SODIO?
El cloruro de sodio por sí mismo no es dañino, de hecho, es indispensable para el correcto funcionamiento del organismo. Es que, ayuda a regular la presión arterial, equilibrar fluidos en el cuerpo y genera un adecuado desempeño de músculos y nervios.
Pero su ingesta excesiva sí hace daño al cuerpo. “Da pie a enfermedades del sistema cardíaco como la hipertensión y también está asociado a la retención de líquidos”, de acuerdo con el estudio de Profeco. Y las mayores cantidades se encuentran en los productos procesados.
¿QUÉ EFECTOS NOCIVOS TIENE EL COMER PAPAS FRITAS DE BOLSA O FRITURAS EN LA SALUD?
El consumo excesivo de papas fritas de bolsa u otros alimentos fritos puede tener varios efectos nocivos para la salud debido a su alto contenido de grasas poco saludables, calorías vacías y sodio. Aquí hay algunos efectos negativos que podrían surgir:
Aumento de peso: Las papas fritas y otros alimentos fritos suelen ser altos en calorías debido al proceso de fritura y al agregado de grasas. El consumo regular y en exceso puede contribuir al aumento de peso y la obesidad.
Problemas cardíacos: Las grasas trans y saturadas presentes en las papas fritas y otros alimentos fritos pueden aumentar los niveles de colesterol malo (LDL) y aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas, como la arteriosclerosis y los ataques cardíacos.
Presión arterial alta: El alto contenido de sodio en las papas fritas de bolsa puede elevar la presión arterial, lo que aumenta el riesgo de hipertensión y enfermedades cardiovasculares.
Impacto en la salud mental: Algunas investigaciones sugieren que una dieta alta en grasas saturadas y trans puede estar asociada con un mayor riesgo de depresión y otros problemas de salud mental.
Problemas digestivos: El consumo excesivo de alimentos fritos puede aumentar el riesgo de problemas digestivos, como indigestión, acidez estomacal y síndrome del intestino irritable.
Mayor riesgo de diabetes tipo 2: Las dietas ricas en grasas poco saludables y calorías vacías pueden aumentar el riesgo de desarrollar resistencia a la insulina y diabetes tipo 2.
Es importante recordar que disfrutar ocasionalmente de papas fritas u otros alimentos fritos no necesariamente causará problemas de salud graves. Sin embargo, el consumo regular y en exceso puede tener consecuencias negativas a largo plazo. Es fundamental mantener un equilibrio en la dieta, incluyendo una variedad de alimentos nutritivos y limitando el consumo de alimentos procesados y fritos.
¿CÓMO DISMINUIR LA INGESTA DE PAPAS FRITAS DE BOLSA Y FRITURAS?
Reducir la ingesta de papas fritas de bolsa y otros alimentos fritos puede ser un desafío, pero hay varias estrategias que pueden ayudarte a hacerlo:
Planificación de comidas: Planifica tus comidas con anticipación y asegúrate de tener opciones saludables disponibles. Esto puede ayudar a reducir la tentación de recurrir a las papas fritas u otros alimentos fritos cuando tengas hambre.
Snacks saludables: Ten a mano snacks saludables y convenientes para satisfacer tus antojos, como frutas frescas, verduras crudas con hummus, yogur griego bajo en grasa o nueces. Estos alimentos pueden proporcionar saciedad y nutrientes sin la necesidad de recurrir a las frituras.
Limita la disponibilidad: Si tienes papas fritas de bolsa u otros alimentos fritos en casa, trata de limitar su disponibilidad almacenándolos fuera de la vista o en lugares menos accesibles. Esto puede ayudar a reducir la tentación de consumirlos con frecuencia.
Cocina en casa: Prepara tus propias versiones saludables de alimentos fritos en casa utilizando métodos de cocción más saludables, como hornear, asar a la parrilla o cocinar al vapor. Puedes hacer papas fritas al horno con un mínimo de aceite y sazonarlas con hierbas y especias para darles sabor.
Consciencia alimentaria: Mantén un registro de lo que comes y cómo te sientes después. Esto puede ayudarte a identificar patrones de consumo de alimentos fritos y encontrar formas de cambiar tus hábitos alimenticios.
Busca alternativas: Explora alternativas más saludables a las papas fritas y otros alimentos fritos. Por ejemplo, puedes probar chips de verduras horneadas, palomitas de maíz caseras sin mantequilla, o chips de plátano horneados.
Trata de reducir gradualmente: Si dependes mucho de las papas fritas y otros alimentos fritos, no te presiones demasiado. Trata de reducir gradualmente su consumo en lugar de eliminarlos de golpe, lo que puede hacer que sea más fácil ajustarse a nuevos hábitos alimenticios.
Recuerda que el cambio de hábitos alimenticios lleva tiempo y paciencia, así que sé amable contigo mismo mientras trabajas en reducir tu ingesta de papas fritas y frituras.
